El ITDP México publicó hoy la nueva versión del Ranking Ciclociudades 2019, una investigación para conocer el desempeño de las políticas y acciones de movilidad en bicicleta en ciudades mexicanas que se realiza desde 2013.
Para esta nueva edición, el Ranking evaluó 31 ciudades mexicanas de todos los tamaños a través de 11 ejes, entre los que destacan indicadores transversales de inclusión social y perspectiva de género.
De acuerdo con Sonia Medina, Coordinadora de Movilidad Activa y Diseño Urbano en el ITDP México y quien encabeza la Estrategia Ciclociudades, “tener en consideración la perspectiva de género en los 11 ejes de evaluación es importante.
“Particularmente en el indicador de Capacidad institucional que es donde se nota más, porque la participación de mujeres dentro de las áreas de trabajo es importante para que las acciones consideren las necesidades particulares de los traslados de las mujeres”.
La nueva edición incluye un apartado de “Acciones de movilidad ante la pandemia por COVID-19” en el que describen algunas implementaciones de distintas ciudades para hacer frente a la emergencia sanitaria a través del fomento al uso de la bicicleta.
“Mientras realizábamos la investigación para esta edición del ranking sucedió la emergencia sanitaria y decidimos agregar lo que diferentes ciudades mexicanas estaban generando (para combatir la pandemia).
“La implementación de ciclovías emergentes (CDMX, Puebla, Guadalajara, Zapopan), las estrategias a través de sus Sistemas de Bicicletas Públicas y otras acciones que se fueron generando.
“Tal es el caso de San Pedro Garza García, Nuevo León, donde implementaron una estrategia integral con ciclovías emergentes, un sistema de préstamo de bicicletas manual, campañas digitales de educación para que la gente que se sube por primera vez a la bicicleta sepa cómo hacerlo en las calles y una estrategia para promover negocios biciamigables.
“En San Luis Potosí hicieron un plan de Movilidad para la Contingencia en el que se visualizan varias acciones que fomentan la movilidad activa y del cual se deriva su ciclovía emergente”, agregó Medina.
No es competencia
De acuerdo con el nuevo enfoque, presentado en la edición del año pasado, las ciudades que participan no compiten entre ellas, pues se reconoce la diversidad de contextos, tamaños y población que podrían afectar a las ciudades en una evaluación plana.
Ante eso, el ITDP decidió contemplar tres niveles de aplicación (local, metropolitano y estatal) que no afectan la evaluación, además de tomar en cuenta el tamaño de las ciudades para, por ejemplo, el indicador de biciestacionamientos cercanos a sistemas de transporte masivo, ya que no todas las ciudades requieren este tipo de infraestructura.
En esta edición el eje mejor evaluado de manera general es el de Regulación, pues, de acuerdo con Sonia Medina, “La mayoría de las ciudades evaluadas ya reconocen a la bicicleta como vehículo en sus reglamentos de tránsito.
“Además, más ciudades contemplan a la bicicleta como vehículo en sus leyes de movilidad u otros instrumentos normativos o tienen guías o lineamientos de infraestructura ciclista o de operación para Sistemas de Bicicletas Compartidas sin anclaje”.
Sonia Medina asegura que lo que más ayuda a las ciudades a salir bien evaluadas en el eje Regulación es que se reconozca a la bicicleta como vehículo.
Por otro lado, el eje que logró menos puntos en general fue el de Otros incentivos, el cual busca conocer acciones que no estén directamente relacionadas con el uso de la bicicleta pero que ayudan a fomentarla.
Por ejemplo, gestión del uso del auto o generar incentivos para que las personas trabajadoras lleguen en bicicleta.
“Casi ninguna ciudad tiene estrategias de incentivos, en la CDMX sólo una alcaldía ha implementado el programa Viernes sin auto”, aseguró Medina.
PRO TIP: Parquímetros, cargos por congestión e incentivos económicos son parámetros que toman en cuenta para sumar puntos en este eje de evaluación.
Por último, Sonia Medina reconoce que sí hay un avance importante en algunas ciudades e invita a todas las personas a revisar la evaluación pues sirve “como línea base para lograr que la bicicleta esté más presente en sus ciudades”.
“Me gustaría ver que más ciudades logren contar con estrategias integrales; con redes de infraestructura ciclista que permitan a cualquier persona circular en bicicleta por la ciudad.
“No solo a ciclistas experimentados, sino también a niñas y niños; que el porcentaje de mujeres en el uso de la bicicleta vaya creciendo cada vez más y que el porcentaje de mujeres dentro de los equipos de trabajo también crezca para que exista una representatividad que incida en la toma de decisiones”, concluyó Sonia Medina, coordinadora de la Estrategia Ciclociudades del ITDP.
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